El martes 27 de mayo de 2025, Hermanos de Polonia, Alemania, Eslovaquia, Ucrania, Italia, Perú y Paraguay se reunieron en Cracovia para celebrar sus bodas de plata sacerdotales. Estos Hermanos recibieron la ordenación hace 25 años en la Basílica de San Francisco de manos de Mons. Edward BIAŁOGŁOWSKI.
Los Hermanos que celebraron su jubileo fueron dieciséis: Fray Dariusz BARNA, Fray Paweł CHMURA, Fray Radosław DŁUGI, Fray Roman GAŽÚR, Fray Jan JANUS, Fray Stanisław KAWA, Fray Robert KIEŁTYKA, Fray Oleksandr LYTVYNYUK, Fray Dariusz MAZUREK, Fray Piotr MICAŁ, Fray Jacek MICHNO, Fray Janusz NOWAK, Fray Tomasz PAWLIK, Fray Paweł SROKA, Fray Lucjan SZCZEPAŃSKI y Fray Sebastian TRACZ.
La solemne Misa de acción de gracias fue presidida por el Ministro de la Provincia de San Antonio y del Beato Jacobo de Strepa en Polonia (Cracovia), Fray Mariusz KOZIOŁ, y la homilía fue ofrecida por el ex formador, conferenciante y Rector de los festejados, Fray Piotr GRYZIEC.
El predicador, refiriéndose a datos estadísticos, dijo que la esperanza de vida media de los hombres en Polonia el año pasado era de unos 75 años y que este período puede dividirse en tres partes más o menos iguales. “Los primeros 25 años son un periodo de maduración, aprendizaje, adquisición de experiencia y preparación para la vida. (…) Los siguientes 25 años son un periodo de intenso trabajo, en el caso de los llamados al sacerdocio, de catequesis, trabajo pastoral, misión y evangelización. Al entrar en la última y tercera fase de la vida, se tiene una gran experiencia de la que se puede sacar provecho más adelante, pero también para compartirla; es también un buen momento para reflexionar sobre lo que se ha realizado en la vida y lo que aún se puede hacer”.
En la parte final de la homilía, hizo referencia a las lecturas litúrgicas proclamadas en toda la Iglesia en este día y llamó la atención sobre dos realidades que los festejados pueden aprender de San Pablo: “La primera: el Apóstol aprovecha cualquier situación para rezar y alabar al Señor. Incluso cuando está en prisión. Que la oración no falte nunca en la vida sacerdotal de cada uno de ustedes. Y sobre todo una oración de alabanza, una oración de adoración. (…) Y la segunda: San Pablo aprovecha cada ocasión para predicar el Evangelio, la enseñanza de Cristo. (…) La oración en primer lugar, la enseñanza en segundo lugar”.
Al final de la homilía, animó diciendo: “Queridos hermanos, mirando la figura del infatigable apóstol Pablo y abiertos a la acción del Espíritu Santo, anunciad el Evangelio al mundo, porque nada necesita más el mundo de hoy para sobrevivir que la palabra de Cristo y el poder del Espíritu Santo”.
En la imagen conmemorativa, los festejados escribieron las palabras del Cántico del Hermano Sol, compuesto por San Francisco de Asís hace exactamente 800 años: “Load y bendecid a mi Señor, y dadle gracias y servidle con gran humildad”.
Al día siguiente, los Hermanos se dirigieron a las Hermanas Clarisas de Cracovia para ofrecer la Eucaristía por ellas y visitaron el Santuario de la Pasión del Señor y de la Madre de Dios en Kalwaria Pacławska, donde antaño siguieron la formación del noviciado y aprendieron la vida religiosa.
Fray Jan M. SZEWEK.
