Como miembro del Consejo consultivo del Instituto para la no violencia de Pax Christi, participé en el último día del Encuentro Mundial de Pax Christi International, celebrado en Florencia el 8 de noviembre de 2025. El evento reunió a constructores de paz de todo el mundo para reflexionar sobre cómo el Evangelio de la no violencia puede guiarnos a través de los conflictos y divisiones actuales.

Uno de los momentos más destacados del encuentro fue la entrega del ‘Premio Pax Christi’ por la Paz 2025 a Mons. Mark J. SEITZ, Obispo de El Paso, Texas – USA. El premio reconoció su incansable compromiso en favor de los migrantes y su constante testimonio de no violencia evangélica a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México. Dado que el Obispo SEITZ no pudo participar en persona, el premio fue recogido en su nombre por su auxiliar, el Obispo Anthony C. CELINO. Además del Obispo SEITZ, Pax Christi otorgó un reconocimiento especial a Annunciation House, a Hope Border Institute y a Las Américas Immigrant Advocacy Center. Estas organizaciones trabajan cada día en primera línea para la asistencia a los migrantes y la defensa de la dignidad humana en la región de El Paso/Ciudad Juárez (México).
Cuando el Obispo SEITZ y su auxiliar, el Obispo CELINO, se unieron a los representantes de estas organizaciones en una audiencia privada con el Papa León XIV, el 8 de octubre de 2025, el Papa les dijo: «La Iglesia no puede permanecer en silencio ante la injusticia. Ustedes están conmigo y yo estoy con ustedes». El Papa reconoció el miedo y el sufrimiento de las familias desplazadas y exhortó a los Obispos estadounidenses a hablar con mayor unidad en defensa de los migrantes.
Para nosotros, los franciscanos, estos nombres y estos lugares no son lejanos. Forman parte de nuestra historia compartida de acompañamiento a los demás. Fray Jarek WYSOCZANSKI, sirve a tiempo completo como voluntario en Annunciation House, viviendo la misión franciscana de presencia y compasión entre migrantes y solicitantes de asilo. El 9 de agosto de 2025, se unió al Battalion Search and Rescue [Batallón de Búsqueda y Rescate], al Proyecto Encuentro, a los Misioneros de Maryknoll y a las Hermanas de San Vicente de Paúl para celebrar la Misa en el desierto cerca de Santa Teresa, en Nuevo México – EE.UU., a pocos kilómetros de El Paso.
Allí rezaron por los cientos de migrantes anónimos que mueren cada año a lo largo de la frontera, muchos de ellos mujeres, y por las familias que quizá nunca lleguen a saber dónde murieron sus seres queridos. El ministerio de Fray Jarek y el de los demás premiados por Pax Christi encarnan el corazón de nuestra vocación franciscana: ser instrumentos de paz, recordar a los olvidados y ver en el rostro de cada migrante la imagen de Cristo.
El encuentro en Florencia concluyó con gratitud y determinación por parte de los participantes. Las historias de valentía en el desierto y de solidaridad en la frontera nos recuerdan que la paz comienza allí donde la compasión echa raíces.

Fray Michael LASKY.