El miércoles 10 de noviembre de 2021 se llevó a cabo en la Biblioteca de la Facultad, la ceremonia de inauguración del 118º año académico de la Pontificia Facultad Teológica “San Buenaventura – Seraphicum.
El encuentro se abrió con un saludo y agradecimiento del Decano de la Facultad Fray Raffaele DI MURO a todos los presentes y especialmente al Gran Canciller de la Facultad y Ministro general Fray Carlos A. TROVARELLI, al Rector de la Pontificia Universidad Antonianum Fray Agustín HERNÁNDEZ, al Rector del Pontificio Ateneo Regina Apostolorum P. José E. OYARZÚN y al Cardenal Matteo ZUPPI, Arzobispo de Bolonia, que ofreció el discurso académico principal sobre la Carta Encíclica Fratelli Tutti del Santo Padre Francisco sobre la fraternidad y la amistad social, que también es objeto de un curso de formación avanzada ofrecido por la Facultad este año académico .
Su discursó mostró que este sueño de fraternidad universal del actual Pontífice fue evidente desde sus primeras palabras el día de su elección. No nació de un impulso utópico, sino de la plena conciencia de un mundo víctima de muchas pandemias y de un verdadero cambio de época, al que la Iglesia católica puede y debe responder. La respuesta no tiene su origen en el Papa Francisco, sino que encuentra sus raíces en la tradición apostólica, actualizada por el Concilio Vaticano II y los pontificados posteriores. La respuesta de la Iglesia no puede ser otra que la construcción de puentes de fraternidad ad intra e ad extra, porque la fraternidad, proprium de la experiencia cristiana desde sus orígenes, desarrollada después también gracias a la experiencia franciscana, es la gran promesa incumplida de la modernidad que, optando por el individualismo, está minando la libertad y la igualdad, incluso allí donde parecían haber sido alcanzadas. “Fratelli Tutti” es, por tanto, el abc necesario para encontrar un lenguaje común; es un documento que, tomando sus orígenes del Concilio Vaticano II, tiene como icono aquel espíritu de Asís que en 1986 permitió a San Juan Pablo II convertirse en el promotor de un verdadero diálogo interreligioso. El diálogo es lo contrario del sincretismo, porque -como dice el Card. ZUPPI- es el diálogo que “te pide que expliques quién eres”. Tras un rápido análisis de cómo el colapso de las ideologías y el desarrollo de un individualismo incapaz de dar felicidad, han formado una generación estéril que ha consumido todo “incluso los sueños”. Además, el Card. ZUPPI señaló que “Fratelli Tutti”, al remarcar que nadie se salva solo, no es una fantasía o un experimento, sino un “sueño con los ojos abiertos, espiritual y concreto al mismo tiempo”. “Fratelli Tutti” no es un simple documento de indicaciones sociopolíticas para la convivencia internacional, sino que es una forma de mirar el mundo con un realismo extremo, partiendo precisamente de la identidad cristiana, porque el “yo” no se encuentra a sí mismo encerrándose, sino en la relación con el otro, porque el amor al prójimo es realista, porque la victoria sobre el individualismo que enfatiza el “yo” está en mostrar cómo el “yo” alcanza su máximo en la confrontación con el otro, en la fraternidad universal. Lo universal no se opone a lo local, porque para un cristiano nadie es un enemigo. El ejemplo está en la historia del encuentro entre Francisco y el lobo de Gubbio, actor y víctima al mismo tiempo de la violencia, que a través de un enfoque dialógico puede revelar la causa de su acción en el hambre, y permitir a Francisco iniciar un nuevo camino de paz eliminando precisamente esa causa.
Expresando un profundo agradecimiento al Card. Matteo ZUPPI por sus palabras, fruto no sólo de una investigación intelectual sino de una experiencia de vida concreta, palpable en sus palabras, el Decano despidió a los presentes, deseando a todos los estudiantes y profesores que este año académico sea realmente fructífero.
Fray Roberto LIGGERI.