Los hermanos del Convento Santa Cruz de Nuestro Señor Jesucristo en Würzburg de la Provincia de Santa Isabel en Alemania, desde hace tiempo decidieron celebrar los 800 años de presencia franciscana en tierra alemana en el día siguiente a la fiesta de Pentecostés, el lunes 24 de mayo de 2021.

Precisamente en el 1221, los primeros hermanos de San Francisco de Asís se establecieron en Alemania e iniciaron así la presencia minorita ininterrumpida en la ciudad de Würzburg. Los Hermanos Menores Conventuales tienen aquí el más antiguo Convento continuamente habitado más allá de los Alpes. La pandemia impidió celebrar esta fiesta como había sido programada, pero la “flexibilidad franciscana” hizo que se pudiese encontrar el modo para celebrar este gran Jubileo.
Parte de la celebración se tuvo al aire libre, en el «Wöllrieder Hof», periferia de Würzburg; los primeros hermanos estuvieron allí para colaborar en el cuidado de los leprosos. El alcalde de Würzburg, Johann Christian SCHUCHARDT, no ha desaprovechado la ocasión para saludar y encontrar brevemente a los hermanos. El alcalde transmitió la felicitación de la ciudad y destacó la importancia del Convento para la vida de la ciudad. Renovó sus elogios a la labor pastoral de los frailes, llamando al convento el «confesionario de Würzburg».
Desde el «Wöllrieder Hof», los hermanos partieron en dirección a la ciudad, acompañados por el Obispo de la Diócesis de Würzburg, Monseñor Franz JUNG, y cuatro Hermanas Franciscanas de Oberzell. Muchos residentes se sorprendieron por esta «procesión». Muchos saludaron amistosamente con el típico saludo bávaro «¡Grüß Gott!». (su servidor – ¡hola!).
Una vez en el convento, el Ministro provincial, Fray Andreas MURK, leyó el saludo del Ministro general, Fray Carlos A. TROVARELLI, que tuvo que aplazar su visita a Alemania. Entre otras cosas, Fray Carlos escribió: “Los hermanos en Alemania se han puesto en camino varias veces en los últimos 800 años. La Provincia ha experimentado altibajos, pero siempre ha logrado volver a empezar. Los reinicios, sin embargo, no están sujetos a datos estadísticos como la edad de los hermanos o el tamaño de una Provincia, sino a la confianza en la fidelidad de Dios y a nuestras profundas convicciones. Un buen ejemplo es la reciente apertura del Convento en la Diócesis de Osnabrück, que demuestra, por ejemplo, que son ustedes personas creyentes y capaces de hacer cosas nuevas junto con otros. El mundo ha cambiado y está en constante movimiento. Incluso en viejas “ubicaciones” o establecimientos como Würzburg y en toda Alemania, pueden ocurrir cosas nuevas. No sólo debemos centrarnos en nosotros mismos, sino incorporar una mirada creyente, fiel y de futuro”.
El Guardián Fray Adam KALINOWSKI ha dado la bienvenida a los hermanos en el refectorio del Convento donde, entre otras cosas, se sirvió un pastel “jubilar”. Al final, a las 5.30pm, celebraron la Eucaristía en la iglesia conventual, presidida por el Obispo. En su introducción, Fray Adam subrayó que: “Los obispos de Würzburg no sólo han acogido a los conventuales a la sombra de su Catedral durante ocho siglos, sino que siempre han concedido su protección y bendición y, además, han dejado mucha libertad a los frailes. Por ello le estamos profunda y sinceramente agradecidos a Usted y a sus predecesores”.
Al comienzo de su homilía, muy profunda y franciscana, el Obispo felicitó a la comunidad por la historia de servicio realizada en la ciudad de Würzburg e hizo algunas observaciones para la vida franciscana de hoy, releyendo la crónica de Giordano de Giano, que narra la llegada de los primeros franciscanos a Alemania. Entre otras cosas, invitó a los frailes a hablar la lengua del pueblo, a dirigirse a todos y a hacerse entender por todos. En segundo lugar, instó a los hermanos a hacer un valiente «no» a todo lo que oscurece y diluye el modo de vivir el Evangelio. También animó a los frailes a no resignarse y a no dejarse guiar por falsos temores, sino a atreverse con la confianza puesta en Dios. Al final, concluyó diciendo: «¡Les deseo muchos años más de bendición aquí en Würzburg!».
La celebración estuvo acompañada musicalmente por el organista Peter RIES, vinculado al Convento desde hace décadas, y por un coro en el que cantaron tres hermanos de Würzburg: Fray Maximilian M. BAUER, Fray Josef FISCHER y Fray Leopold MADER.
Después de la Misa, el día de celebración terminó con una relajante barbacoa. El Vicario provincial, Fray Mateusz KOTYŁO, se encargó del asado y el Fray Tobiaanivers MATHEIS sirvió la cerveza casera «Jubileo».
Damos gracias al Señor porque, incluso en medio de la pandemia, fue posible celebrar con alegría. Si Dios quiere, este jubileo se celebrará solemnemente el lunes de Pentecostés de 2022.

Fray Andreas MURK, Ministro provincial.

Carta del Ministro general >>>