El sábado 30 de junio del 2018, ha sido celebrado en Elizondo (Navarra-España), el 50º aniversario de la construcción del Seminario seráfico como centro de formación franciscana.

Han participado en el evento: el Arzobispo de Pamplona-Tudela Mons. Francisco PÉREZ, el Ministro general Fray Marco TASCA, el Ministro provincial de la Provincia de Nuestra Señora de Montserrat en España Fray Ángel Mariano GUZMÁN LUDEÑA, el Asistente general FIMP (Federación Inter-mediterránea Ministros Provinciales) Fray Joaquín Ángel AGESTA CUEVAS, los últimos dos rectores del seminario Fray Adriano ZORZI y Fray Gianmarco ARRIGONI, el asistente del seminario Fray Roberto PERETTI, el responsable del liceo Fray Francesco ERVAS y Fray Adolfo GONZÁLEZ GÓMEZ, quien fue uno de los primeros educadores de la Provincia española, junto con Fray Giorgio CARRARO, primer rector.
A nuestra llegada a Elizondo encontramos 180 ex alumnos, algunos con mujer e hijos, quienes abrazaron sensiblemente emocionados a los frailes, pues no los habían vuelto a ver desde hace 30-40 años.
Es verdad que de los dos edificios (escuela media y liceo) no ha quedado nada, que han sido vendidos y en el mismo lugar ahora han construido casas de recreo y departamentos; pero permanecen las piedras vivas: aquellos muchachos a quienes los frailes ayudaron a crecer y formarse.
Muchos han manifestado abiertamente su reconocimiento por todo cuanto recibieron durante sus años de formación. Estuvieron presentes algunos profesores seglares de aquellos años y el personal no docente, en particular las últimas dos cocineras que han trabajado ahí por casi veinte años.
Ha sido un enorme gozo poder reencontrarse. El Obispo de Pamplona ha manifestado su reconocimiento por la obra educativa realizada por los frailes en Elizondo y su presencia en el valle de Baztán. También el Ministro general, a manera de conclusión de la Santa Misa, ha expresado en lengua española palabras de agradecimiento por todos los frailes que se han sucedido en esta obra educativa, y ha pedido a los jóvenes atesorar cuanto han recibido. El vídeo de la foto-memoria fue visto por los grupos y en todos suscitó recuerdos, emociones y profunda alegría. Todo el bien profuso ha permanecido en los corazones de estos jóvenes y ha sido la más grande satisfacción para los frailes.
Un gracias a la familia de Gazolaz, antes sede de una comunidad nuestra, que nos ha hospedado, y a los ex alumnos Francisco Javier CIORDIA y Tomás LOYARTE por la organización.
A los presentes y a los ausentes, llegue nuestro recuerdo y nuestra oración.

Fray Gianmarco ARRIGONI