El mandato misionero que Jesús hace a sus discípulos, lo hace suyo San Francisco dirigiéndose a sus hermanos. Ir y anunciar el Evangelio es una propuesta siempre vigente y siempre urgente.

 Sabemos la importancia del salir del propio lugar para evangelizar, cosa que se realiza en las misiones ad gentes; sin embargo, la misión general de la Iglesia abarca todos los tiempos y todos los lugares, por lo que afirmamos también que las misiones populares son igual de importantes. La Provincia mexicana tiene lugares de misión privilegiados, como la sierra de Guerrero, donde se atienden comunidades indígenas en las parroquias de Xochistlahuaca y Tlacoachistlahuaca. Pero hay otros muchos lugares que piden atención, de una manera especial en la Semana Santa, y los frailes están dispuestos para colaborar.
En estas misiones participan los frailes estudiantes de nuestras casas de formación, así como los jóvenes que están en proceso vocacional, y algunos frailes sacerdotes que no tienen responsabilidad de atender la propia parroquia. A esta tarea se suman algunas hermanas religiosas y grupos de laicos con quienes tenemos cercanía y comunicación. Una de las comunidades que atendimos este año 2023 (del 2 al 9 de abril) fue “Cerritos de Zavala”, en San Luis Potosí, a una hora de la capital del Estado. Un lugar muy árido, de vegetación con espinas y que se dedican principalmente a la producción de chile. Lugar donde el fenómeno de la migración a los Estados Unidos es parte de la realidad, parte de la cultura.
Tuvimos diferentes actividades, comenzando por la procesión del domingo de ramos, dando con ello principio oficial a la misión. Lunes, martes y miércoles de la Semana Santa iniciamos el día con el rosario a las 6:00 am, por la mañana pláticas para niños, y por la tarde pláticas para jóvenes, adultos, confesiones y la Santa Misa. El triduo pascual tuvimos las celebraciones propias.

Fue una experiencia maravillosa, en la que Dios nos dio la oportunidad de compartir la fe, de ofrecer y recibir, de enriquecimiento mutuo. Al final de la misión, junto con las felicitaciones por la Pascua celebrada, queda el compromiso de orar unos por otros. Pidamos a Dios por las misiones.

Fray Jorge HERNÁNDEZ DE LUNA