En la solemnidad de la Asunción de la Santísima Virgen María, el 15 de agosto de 2021, el Presidente de la República de Polonia Andrzej DUDA, visitó Niepokalanów, el Convento fundado por San Maximiliano María KOLBE en 1927.

El Presidente llegó a las 18:35 horas y, acompañado por el Vicario de la Provincia de la Madre de Dios Inmaculada en Polonia (Varsovia) Fray Mirosław BARTOS, y el Guardián de Niepokalanów Fray Mariusz SŁOWIK, se dirigió en primer lugar a la Capilla de la Adoración Perpetua, donde hay un Altar-Ostensorio llamado “Estrella de la Inmaculada”, que es la sede del Centro Mundial de Oración por la Paz (véase: https://www.ofmconv.net/es/mondo-le-12-stelle-nella-corona-di-maria/), y luego a la Basílica de la Madre de Dios Inmaculada, Mediadora de todas las gracias.
A continuación, visitó el Santuario de San Maximiliano Kolbe, la primera y más antigua capilla de Niepokalanów, que recuerda los tiempos de su fundador. En la celda del Convento donde Kolbe fue detenido por la Gestapo en 1941, el Presidente DUDA dejó un recuerdo en el libro conmemorativo.
A continuación, se hizo entrega de un regalo al Guardián: una imagen de Nuestra Señora de la Victoria; los hermanos ofrecieron un álbum fotográfico de Niepokalanów y un ejemplar de los escritos de San Maximiliano M. KOLBE. EL Presidente visitó también el Museo de los Bomberos, que contiene exposiciones y recuerdos relacionados con las actividades de los Bomberos de Niepokalanów, y el Museo del Papa, que contiene varios “papamóviles”, utilizados por San Juan Pablo II durante sus peregrinaciones en Polonia. La visita terminó a las 20:00 horas.
Este es el texto escrito por el Presidente Andrzej DUDA en el libro conmemorativo de Niepokalanów:
“En este momento especial de celebración nacional del centenario de la recuperación de la independencia de la República de Polonia, en el 80º aniversario del martirio de San Maximiliano Kolbe, les agradezco la oración común y la oportunidad de reflexión espiritual, en esta visita al Santuario de Niepokalanów donde San Maximiliano ejerció su ministerio. Su figura y el sacrificio supremo de su propia vida son un gran testimonio del amor y la solidaridad cristianos, y un conmovedor símbolo del martirio polaco durante la Segunda Guerra Mundial. Deseo toda la bendición de Dios al Vicario provincial, al Guardián y a toda la comunidad de Hermanos Menores Conventuales de Niepokalanów, y espero sinceramente que, siguiendo el ejemplo de San Maximiliano, los hermanos puedan contribuir a cultivar los valores fundamentales de nuestra sociedad, a crear vínculos entre las personas y a fortalecer la comunidad nacional. Que el buen Dios apoye todos los esfuerzos con los que Niepokalanów irradia el mensaje de amor al prójimo a toda Polonia”.

Oficina de Comunicaciones
Foto: Fray Mieczysław Wojtak

Foto: Fra Mieczysław Wojtak