Como cada año, el primer sábado de octubre en el Santuario nacional de Subukia – Kenia, también este año 2018 ha tenido lugar la “Jornada Nacional de Oración por la Paz”. El Santuario está confiado al cuidado de los Frailes Menores Conventuales de la Custodia provincial de San Francisco de Asís, de la Provincia de San Maximiliano M. Kolbe en Polonia (Gdansk).

El encuentro de oración lo organizó el Episcopado católico de Kenia con el tema: “No temas María, porque has hallado gracia ante Dios” (Lc. 1, 30). Las celebraciones han iniciado el sábado por la tarde con la Santa Misa; siguieron la procesión eucarística y la adoración durante toda la noche; el todo concluyó con la Eucaristía de indulgencia del Domingo.
Durante todo el tiempo, los frailes y los demás sacerdotes administraron el Sacramento de la Penitencia a los numerosos peregrinos.
Junto con el Nuncio Apostólico han tomado parte en la celebración 17 Obispos; participaron 50 mil peregrinos llegados de todas partes de Kenia.
Al momento de la conclusión del encuentro, los numerosos peregrinos fueron “bendecidos” por la lluvia, considerada por todos como una ‘gracia del cielo’.
El pueblo católico de Kenia es muy devoto a María Madre de Jesús, y muchos (individualmente, familias y grupos) peregrinan a este Santuario nacional durante el año, en diversas ocasiones. La comunidad de los frailes de Kenia se dedica no sólo a preparar estos momentos, sino a ofrecer asistencia sacramental y logística.
El lugar recibió el nombre, por el Cardenal OTUNGA, de ‘Aldea de María’ en 1984. El nombre de ‘Subukia’ proviene del vocablo Masai ‘isupuku’ que significa ‘tierra en relieve’; de hecho, el Santuario está situado en la parte alta de esta zona y así la gente dice: ‘la Madre que siempre nos mira’.
Ahí se encuentra también una fuente de agua milagrosa, como muchos profesan; esta agua nace en la cima del relieve (donde se celebra el Via Crucis subiendo numerosos escalones) y nunca se seca, inclusive durante las estaciones de sequía.
El Santuario atrae tanto cristianos como no cristianos; todos se sienten atraídos por este ‘lugar sagrado’, como lo anuncia una leyenda en su entrada.
El Santuario ha sido construido en forma de corona de María y realizado casi exclusivamente con los donativos de los cristianos del lugar; alcanza los 50 mts de diámetro y puede albergar a más de 5 mil personas.
A lado existe también un grande convento para una numerosa comunidad de frailes dedicados al servicio pastoral. Además, los hermanos, con ayuda de la Custodia de Asís, han construido un “centro espiritual” con capacidad para 60 recámaras, por las diferentes actividades que se realizan en el Santuario y sus alrededores. Ha sido construida también una pequeña escuela de carpintería para los jóvenes. El terreno donado a la Orden por la Conferencia Episcopal es muy grande y por ello los frailes estudian numerosos planes de desarrollo para este lugar.

Fray Kazimierz SZULC, Custodio provincial